Dos noches donde el público se entregó sin límites a la música de El Penco fue lo que se vivió este viernes 20 y sábado 21 de octubre durante las dos presentaciones que el cantante tuvo en el Auditorio Pabellón M.
En ambos shows Leandro Ríos logró un desborde de energía que transmitió a cada uno de sus fans que no dejaron de corear y bailar cada uno de los temas durante sus dos conciertos.
En punto de las 22:00 horas Leandro apareció en escena a través de un elevador para dar paso a su famosa frase: “Ya llegó el de Los Ramones” para posteriormente iniciar con “La Picaré” y “Muchacha Borracha”.
Los primeros invitados de la noche fueron Javier López y sus Vallenatos con quienes cantó “Mentiras” y “Sal y agua”, donde la química que hay entre ambos fue notoria; ya que tanto Leandro como Javier y su hijo contagiaron su estilo colombiano a todos los asistentes.
Otros de los temas que ofreció el cantante fueron “Muchacha Borracha”, “Por Sentimental” y “La Mejor Mujer del Mundo”, entre otras, pero el momento emotivo de la noche fue cuando interpretó “Oye Viejo” con el que recordó a su padre fallecido y que por momentos la emoción no lo dejó cantar.
Leandro Ríos es un cantante muy sencillo y humilde al que le gusta estar en contacto con su gente y cuando tocó el turno al tema “Una no es ninguna” se bajó del escenario para caminar entre los pasillos y estar más cerca de la gente, lo que fue muy festejado por los ahí reunidos.
El segundo invitado de la noche fue Al Tiro de Armando Ramos, juntos levantaron al público de sus asientos al interpretar “A la Antigüita”.
Pero aquí no paraba todo, aún faltaba Don Lorenzo de Monteclaro quien dio una muestra de que la edad es solo un número, pues cantó, bailó y bromeo junto a El Penco al interpretar “Ausente” y “Árboles de la barranca”.
La noche del sábado la invitada sorpresa de la noche fue Vicky Terrazas con quien Leandro cantó “El Ranchero y la Rancherita” y “Y Basta Ya” y ya en solitario interpretó “Antes muerta que sencilla”, tema de cuando ella formó parte de Horíscopos de Durango.
Fue así que durante dos conciertos de 4 horas cada uno Leandro Ríos demostró porque es uno de los grandes ídolos de la música norteña, además de ofrecer una producción de primer nivel a cargo de Alejandro Pujol.