La compositora e intérprete celebra el 10 de mayo porque sus hijos la honran, Emilio le hace poemas espectaculares, por lo que lo festeja con mucho amor, abriendo su alma y espíritu para poder recibir el amor de sus hijos y de las personas que la felicitan ese día y a su madre igual, agradeciéndole en el alma todo lo que hizo por ella porque es muy difícil la maternidad.
Ana Bárbara dice disfruta ese día, trata de estar para ella y su familia especialmente el 10 de mayo aunque no lo olvida el resto del año.
La Reina Grupera asegura que tiene instinto maternal de nacimiento, ama a los bebés, pues ella vivió situaciones difíciles, fue una niña muy amada por su madre, muy protegida hasta cierto punto, pero también tuvo déficits que la marcaron, por lo que de ahí salió su parte protectora a sus hijos de vientre y a María, Paula y Emilio en la medida de lo posible, no es la mamá perfecta, pero cuando van a visitarla los regaña, tiene su temperamento y diferencia con ellos, les sigue marcando límites para que se forjen como buenos seres humanos, haciendo lo mejor posible con defectos y virtudes.
Hay poco contacto con Paula, pero sigue siendo su bebé, su niña, su princesa de polvos de hada y ella lo sabe.
Sobre María, Ana Bárbara siempre deja comentarios en sus fotos en sus redes sociales, dice que ella está mandando un mensaje al mundo con su desnudez, que es una desnudez del alma, hay libertad de expresión en su arte y la admira mucho y aunque María ya la ha retratado, siempre será un honor que lo haga en esta faceta artística, así que cuando se le ofrezca Ana aceptará.
Por último, sobre sus otros hijos, la intérprete de “Fruta prohibida” comentó que son músicos, ya que Emilio desde Cuernavaca es súper sensible, Emiliano en la guitarra le ayuda en algunas estructuras de letra, Jerónimo y Chema son súper musicales por lo que espera que el Universo los tenga con ella por muchos años.
SMP